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COMO FOMENTAR LA BUENA AUTOESTIMA EN NUESTROS NIÑOS
Cómo podemos ayudar a nuestro niño a fomentar la buena autoestima?
El
significado de la autoestima es la forma en la cual un individuo se
percibe a sí mismo, en otras palabras, los propios pensamientos y
sentimientos que tiene sobre él o ella y su capacidad para lograr las
cosas que son importantes para sí mismo. Esta autoestima se moldea no
sólo con las propias perspectivas y expectativas del niño, pero también
con las opiniones y las expectativas de la gente importante en su
vida: qué piensan de él o ella y cómo la tratan sus padres, profesores y
amigos. Entre más cerca sea la forma como se percibe a sí misma (cómo
ella se ve) a su ideal de ella misma (cómo ella quisiera ser), más alta
será su autoestima.
Para una buena autoestima, los niños necesitan fomentar o adquirir todas o algunas de las siguientes características:
Su niño debe sentirse seguro de sí mismo y de su futuro. (¿Qué va a ser de mí?)
Su
joven necesita sentirse aceptado y querido por otros, comenzando por su
familia y después extenderse a otros grupos tales como los amigos, los
compañeros de clase, los compañeros de equipos deportivos, de una
iglesia o un templo e incluso de la vecindad o comunidad. Sin esta
aceptación o identidad de grupo, él o ella puede sentirse rechazado,
solo y a la deriva sin un hogar, una familia o un grupo.
Sentido de tener un propósito en la vida.
Su
niño debe tener metas que le den sentido, propósito y dirección a su
vida y una vía para canalizar su energía, para alcanzar logros y para
expresarse. Si carece de un sentido y propósito para su vida, puede
sentirse aburrido, sin metas e incluso resentido por ser presionado por
usted o por otras personas en ciertas direcciones.
Sentido de tener habilidad personal y orgullo.
Su
niño debe sentirse seguro de su capacidad para resolver los desafíos en
su vida. Este sentido de fortaleza personal emana de haber tenido
experiencias positivas y haber resuelto problemas por sí solo, de ser
creativos y obtener resultados positivos por sus esfuerzos. Fijar
expectativas apropiadas, sin ser demasiado bajas o demasiado altas, es
crítico para desarrollar capacidad y confianza en sí mismo. Si usted
sobreprotege a su niño y él depende demasiado de usted, o si sus
expectativa son tan altas que nunca tiene éxito, él o ella puede
sentirse impotente e incapaz de controlar las circunstancias en su vida.
Sentido de poder confiar.
Su niño
necesita sentir que puede confiar en usted y en sí mismo. Para logar
este objetivo, usted debe mantener sus promesas, brindarle apoyo y
solidaridad y dar a su niño oportunidades para demostrar que es digno de
confianza. Esto significa creer en su niño, y tratarlo como persona
honesta.
Sentido de tener responsabilidad.
De
a su niño la oportunidad de demostrar lo que él o ella son capaces de
hacer.
Permítale asumir responsabilidades o trabajos sin ser supervisado
todo el tiempo. Esto demuestra que usted le tiene confianza, una
especie de ensayo para "dejarlo solo" ; tenga fe.
Sentido de poder contribuir.
Su
niño desarrollará un sentido de importancia y responsabilidad si usted
le brinda oportunidades de participar y de contribuir de una manera
significativa en una actividad. Hágale saber que ella realmente cuenta.
Sentido de poder seleccionar y tomar decisiones reales.
Su
niño se sentirá autorizado y en control de los acontecimientos cuando
puede tomar o influenciar decisiones que considera importantes. Estas
opciones y decisiones necesitan ser apropiadas para su edad y sus
capacidades y para los valores de la familia.
Sentido de contar con autodisciplina y autocontrol.
A
medida que su niño se esfuerza por alcanzar y ganar más independencia,
él o ella necesita y desea sentirse que pueda hacer las cosas por sí
mismo. Una vez que usted fije las expectativas, las pautas, y las
oportunidades en las cuales él o ella se pueda poner a prueba, el niño
puede reflexionar, razonar, solucionar problemas y considerar las
consecuencias de las acciones que puede elegir. Este tipo de consciencia
de sí mismo es crítico para su crecimiento futuro.
Sentido de ser motivado, apoyado y reconocido.
No
sólo tiene su niño la necesidad niño de lograr metas, pero también
necesita recibir comentarios y reconocimiento—un mensaje significativo
de que hace las cosas bien, de que son del agrado de otras personas y de
que "lo está logrando".
Anime y elogie a su hijo, no sólo por lograr
una meta fijada, pero también por sus esfuerzos e incluso por los
pequeños progresos o cambios para mejorar. ("Me gustó la manera como
esperaste tu turno", "Fue un buen intento"; "Veo que te estás esforzando
más", "¡Eres una niña buena!) Bríndele sus comentarios lo más pronto
posible para fortalecer su autoestima y para ayudarle a conectar sus
comentarios con la actividad realizada.
Sentido de que hay que aceptar los errores y el fracaso.
Su
niño no debe sentirse mal, ni derrotado, cuando comete errores o cuando
fracasa. Explíquele que estos obstáculos o reveses son parte normal de
la vida y del aprendizaje y que ella puede aprender o beneficiarse de
esto. Deje que su apoyo, comentarios constructivos y reconocimiento a
sus esfuerzos supere cualquier percepción de fracaso, culpabilidad o de
vergüenza que él o ella pueda sentir, brindándole renovada motivación y
esperanza.
De nuevo, haga comentarios específicos ("Si lanzas la bola
así, te puedo ayudar) no negativos o que lo hagan sentir personalmente
aludido ("Eres tan torpe", "Nunca lo lograrás").
Sentido de autoestima familiar.
La
autoestima de su niño inicialmente se forma dentro de la familia y por
consiguiente está sumamente influenciada por los sentimientos y las
percepciones que cada familia tiene de sí misma.
Algunos de los
comentarios anteriores se aplican a la familia para fomentar su
autoestima. Además, tenga presente que el orgullo familiar es esencial
para la autoestima y se puede nutrir y mantener de muchas maneras,
incluyendo con la participación o la vinculación a actividades de la
comunidad, continuando la herencia familiar y de los antepasados, o
cuidando de otros parientes o miembros de la familia.
A las familias les
va mejor cuando los miembros se enfocan en las virtudes o puntos
fuertes de cada uno, evitan la crítica excesiva y se defienden o
protegen entre sí fuera del entorno familiar.
Los miembros de la familia
creen y confían en cada uno, respetan sus diferencias individuales y se
demuestran cariño los unos a los otros. Sacan tiempo para pasar juntos,
ya sea durante los festivos, ocasiones especiales o simplemente para
divertirse.
Artículo de Healthychildren.org
Fuente: Caring for Your School-Age Child: Ages 5 to 12 (Copyright © 2004 American Academy of Pediatrics)
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