DEFICIT DE ATENCION / HIPERACTIVIDAD / TRASTORNOS DE CONDUCTA


“Mi hijo no atiende, no se queda quieto desde que amanece hasta que anochece. A veces reacciona de forma muy impulsiva por asuntos de poca importancia”.
Así describen a veces los padres a su hijo/a y manifiestan su preocupación. ¿Qué significan estos datos?

Es posible que tengamos un déficit de atención, acompañados de hiperactividad y que precise de cuidados particulares para ayudar a mejorar a los niños y niñas con ésta dificultad.

Por qué se produce este déficit de atención?

La transmisión hereditaria se comprueba en alto porcentaje. Estudios genéticos constatan la implicación de diversos genes. Existen evidencias muy sólidas de una alteración del funcionamiento cerebral.

Así, hay suficientes estudios para entender que es una afección que involucra al sistema nervioso. No es un problema de mal carácter, caprichos y mala crianza.

Qué otros factores influyen?

~Consumo de alcohol, tabaco, drogas y/o estrés emocional durante el embarazo.
~Menos de 2.500 gramos de peso y/o falta de oxígeno al nacer.
~Encefalitis o infección del sistema nervioso.

Como se manifiesta?

~Déficit de atención
~Hiperactividad
~Impulsividad

Son los datos fundamentales, un niño que:

~Cambia de una actividad a otra.
~Sube a todas partes
~No es capaz de quedar sentado
~No escucha cuando se le habla
~Habla constantemente  e interrumpe las conversaciones


Y en la escuela?

Los profesores observan que:

~No presta atención
~No acaba las tareas
~Pierde sus materiales de trabajo
~Interrumpe al profesor
~No espera su turno
~Interrumpe el juego de otros niños.


El Diagnóstico 

Es fundamental la observación cuidadosa del niño. Padres, maestros, abuelos, pediatras aportan los datos principales.

Existen test con escalas que ayudan si no hay seguridad con el diagnóstico.
Tomografías, electroencefalogramas, análisis varios se realizan si hay sospecha de lesiones del sistema nervioso. Siempre queda a criterio de profesionales especializados.


Qué pasa con los niños que no reciben tratamiento o asistencia? 

La mitad de los hiperactivos al llegar a la edad adulta, seguirán con el problema.

Por lo tanto, siempre hay que proveer al niño y niña de una ayuda adecuada, temprana, profesional y con los familiares involucrados. Es la clave para un buen futuro del niño.


Y cuál es el tratamiento?

1. Con los padres, el niño y la escuela: entender el trastorno y hacer que comprendan al niño.

2. Elevar la autoestima del niño.

3. Técnicas para mejorar la conducta.

4. Intervención psicológica en el niño con profesionales.

5. Intervención en la escuela.

6. Utilización de medicamentos que serán indicados solamente por profesionales.


Es decir, tenemos mucho que hacer. Puede mejorar sustancialmente el niño y ser mucho más feliz.


Comentarios